En ningún momento se le hizo llegar un tratamiento psicológico ni
psiquiatrico por que en Ayacucho dichos profesionales brillan por su
ausencia .
La mujer que pertenecía a una organización religiosa pensó que
tendría el don de la Sanación y le sacó los órganos a su propia madre.
Algunos comuneros de Andabamba señalan que fué víctima de la violencia
que se vivió en Ayacucho y perdió a su padre a muy temprana edad, por
ello su carácter era muy conflictivo por lo que preferían apartarse.
Vivía en Ica y llegó a Paccha para según ella misma indicó " Sacar el
demonio y al hijo del diablo del interior de su madre".
La joven fue encontrada muerta y un grupo de ciudadanos aun la
maldicen pero muchos otros se conmueven por las circunstancias que
llevaron a dicha niña a enloquecer y nunca recibir el apoyo de su
sociedad.