Una cantidad considerable de productos alimenticios cuya fecha de
consumo ya vencieron, fueron destruidos en una zona descampada.
Gaseosas, galletas, leche, golosinas y otros de primera necesidad
fueron colocados en el suelo para luego ser aplanados y de esta
manera ser triturados y evitar un uso posterior de sus envases.
Previamente se habìa desarrollado operativos en la bodegas y centros
de venta de dichos alimentos y golosinas.